Nuevo sistema de importaciones

Complicaciones en la producción

El rechazo en el sistema que recibieron los importadores generó consultas entre los despachantes de aduana, que fueron a pedir explicaciones a los funcionarios de la AFIP. Estiman impacto recesivo en la actividad.

En el marco de la aplicación del nuevo sistema que regula el acceso a los dólares del Banco Central, las automotrices decidieron hace una semana suspender la producción. “Estamos trabajando al límite”, dicen.

En las terminales automotrices nadie se sorprendió. En las otras fábricas, integrantes de la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), también están con dificultades de abastecimiento.

“El miércoles el sistema del SIRA directamente colapsó. No funcionó en todo el día”, dijeron en otra terminal. En una cuarta empresa agregaron que, si bien ellos pudieron operar las solicitudes de importación de manera normal, temen que su operación termine paralizándose por el lado de los proveedores.

En tanto, la Unión Industrial informó que hay preocupación por las complicaciones en el acceso a insumos importados para la producción destinada al mercado interno y a la exportación.

Uno de los sectores que rápidamente expuso críticas al SIRA es el de los textiles, que a través de distintos representantes anticipó la potencial paralización de la actividad si no se libera de forma urgente el ingreso a la Argentina de prendas y telas. En ese sector aseguran que el rubro está a un paso del freno total por falta de hilados y dan por descontado que faltará ropa para el invierno de 2023.

“Los representantes de la UIA coincidieron en la necesidad de generar mecanismos previsibles que eviten discrecionalidades y permitan la planificación de la producción, quedando claro que es expresa la necesidad de certidumbre que no queda despejada en este punto con la mecánica dispuesta, lo que será transmitido a las áreas de Estado que correspondan”, concluyeron.

En este escenario, de escasez de dólares tanto en stock como flujos, el gobierno puso en marcha un nuevo sistema de control de importaciones que más que duplicó la cantidad de productos sujetos a Licencias No Automáticas de importación (LNA). Los productos sujetos a tales licencias pasaron de 1,516 a 4,193, una diferencia de casi 2,700 posiciones arancelarias. Esta ampliación alcanza al 46% de las importaciones totales que hizo el país entre enero y agosto, según datos del INDEC. Antes, los productos sujetos a LNA representaban “solo” el 29% de las importaciones totales, esto afecta un flujo de importaciones que totaliza unos USD 1,300 Millones al mes, si tenemos en cuenta los últimos tres meses.

En definitiva, estas medidas parecen anticipar que el gobierno una vez más decide postergar un plan de estabilización como el que proponía Rubinstein antes de ser nombrado viceministro. Por cierto, las declaraciones de los funcionarios del área económica, el viernes Sergio Massa y el martes Miguel Ángel Pesce, fueron enfáticas en contra de un “salto cambiario” y las políticas de endurecimiento del cepo parecen ir en ese sentido.