El diputado nacional Eduardo Toniolli sostuvo que, transcurrida gran parte de la gestión de Omar Perotti en el gobierno provincial, “hay una sensación dentro del peronismo de necesidad de volver a empezar desde cero”. Por ese motivo, y otros, confirmó en entrevista con Marcelo Fernández en el programa «Así Estamos» (domingos a la medianoche por Telefe Rosario) que competirá por el sillón de la Casa Gris en 2023.
“Tengo 45 años, milito desde que tengo 15, estudié toda mi vida cuestiones relacionadas con la administración pública pero por sobre todas las cosas siempre participé en la vida pública desde distintos ámbitos, y esto me apasiona”, repasó a la hora de expresar las causas que lo llevan a candidatearse a gobernador de Santa Fe. Pero también reconoció que hay otro motivo: “Hay una sensación dentro del peronismo de necesidad de volver a empezar desde cero”.
A la hora de poner bajo la lupa la administración de Perotti, valoró “lo hecho en la obra pública, que se ha sostenido en momentos difíciles y también hay que mencionar que supo sostener el ritmo de la gestión anterior (de Miguel Lifschitz); también en lo productivo se supo acompañar el impulso que se instaló desde la Nación”.
“Toda la potencia que tenía esta gestión en Seguridad, se deshilachó”
Sin embargo, fue claro cuando tuvo que señalar el déficit de este gobierno: “Es imposible discutir política en Santa Fe sin discutir la seguridad pública. La gestión de Perotti arrancó bien, quizás no desde los números, pero tenía el interés de poner las cosas blanco sobre negro. Se intentaron hacer reformas profundas y se enviaron tres proyectos a la Legislatura que no avanzaron. Una parte de la oposición dejó dormir los proyectos y el núcleo más duro de la gestión provincial tampoco tendió puentes para intentar avanzar en un acuerdo. Básicamente, dejaron que esos proyectos de reforma murieran”.
“En seguridad se empezó la gestión con una línea definida y se termina con alguien que forma parte de la misma fuerza policial –siguió–. No tengo nada en contra del ministro Rimoldi, pero se retrocedió en cuanto al control civil sobre la fuerza de seguridad. Y se necesita más gestualidad para disociar el delito de la institucionalidad, y no me refiero solamente a las fuerzas de seguridad. Toda la potencia que tenía esta gestión en Seguridad, se deshilachó”.
La agenda política
Desde la mirada que le da su cargo de diputado nacional, compartió la sensación de que la política discute cosas que no son de interés del pueblo. “Sí, hay una percepción de parte de la población de que la discusión política pasa por lo judicial-institucional, como el caso del Consejo de la Magistratura y demás. Si hoy le tengo que explicar a mi vecina que la discusión política hoy pasa por ahí, me da vergüenza, no me da la cara. Tenemos que debatir sobre los grandes problemas que tiene la Argentina”, señaló.
“Hay una agenda que tiene que ver con la producción y el trabajo, que es lo que nos sacará adelante y que la política debe poner en el centro de la escena. Este año hubo un proceso de discusión muy interesante en la Cámara de Diputados, ya que se trabajaron temas interesantísimos”, dijo.
Luego defendió a la vicepresidenta Cristina Fernández al considerar que “es abrumadora la evidencia de que hay una parte de la Justicia con un sector de la política y, por qué no del círculo rojo, que a Cristina la tienen entre ceja y ceja. Hay evidencia de que existe un proceso contundente de lawfare. ¿Esto quiere decir que en el gobierno de Cristina no hubo casos de corrupción? Para nada, por supuesto que los hubo, han sido evidentes e incluso algunos fueron juzgados durante su propio gobierno”.
Como referente del Movimiento Evita, una de las fuerzas que integra el Frente de Todos, Toniolli señaló: “Siempre hemos tenido muchísimo respeto por las figuras del Frente de Todos: Cristina, Alberto Fernández y el mismo Sergio Massa. En la primera mitad del año nos faltó tener circuitos de decisión política y eso impactó en nuestro frente. La llegada de Massa a Economía es un nuevo punto de equilibrio”.
“La gestión del gobierno nacional ha tenido luces y sombras. Quizás hoy es fácil colgarle el sambenito a Alberto sin recordar todo el proceso: veníamos de una brutal recesión y a los dos meses de asumir se encuentra con una pandemia sin precedentes. De esa situación se logró salir de una forma potente para muchos sectores productivos, y para ello hubo decisión política; el problema es la inflación, que no sólo dificulta llegar a fin de mes sino en algunos casos a mitad de mes”, concluyó.