Violencia en Rosario

Tras allanamientos detienen a otras tres personas por el crimen de Máximo Jerez

Horas después del intento de linchamiento al presunto narco vinculado al asesinato del nene de 12 años, la Justicia llevó a cabo el procedimiento en una vivienda del barrio Godoy.

Las fuerzas de seguridad de Rosario allanaron este lunes por la noche una vivienda del barrio Godoy en busca del auto desde donde habrían partido los disparos que mataron a Máximo Jerez y detuvieron a otras tres personas que podrían estar vinculadas de algún modo a la balacera que terminó con la vida del nene de 12 años e hirió a otros tres menores.

El procedimiento encabezado por el fiscal Adrián Spelta tuvo lugar horas después del intento de linchamiento por parte de familiares, amigos y vecinos del niño asesinado hacia un presunto narcotraficante al que acusan de estar detrás del crimen y que fue también fue detenido.

Los nuevos arrestados son dos jóvenes y una mujer que se encontraban en el lugar del allanamiento, en cuyo garage encontraron el vehículo en cuestión, similar al del ataque. Además, les incautaron 10 dosis de cocaína y tres teléfonos que serán peritados próximamente.

Se trata de la primera actuación de este tipo que la Justicia ordena en el marco de este caso y fue realizada en un barrio que se encuentra un tanto distante al lugar del asesinato de Jerez, ocurrido cuando un grupo de personas terminaba de festejar un cumpleaños en la vereda el domingo, en Cabal al 1300 bis, en el noroeste de la ciudad.

Según declararon algunos testigos, un hombre disparó varias veces contra ellos y no solo impactó en el pecho a la víctima fatal, sino que hirió a otros tres chicos que fueron llevados por los vecinos al Hospital de Niños Zona Norte, donde permanecían internados.

Este lunes, poco después del velatorio de Máximo, allegados al menor ingresaron por la fuerza al domicilio del hombre a quien apuntaron como el autor del crimen en el barrio Los Pumitas y, además de intentar lincharlo, le destruyeron, incendiaron y desvalijaron las instalaciones, ubicadas a menos de 100 metros del sitio donde Jerez recibió el disparo mortal.

Un grupo especial de la Policía sacó al acusado de esa casa y, en medio de forcejeos, botellazos y pedradas, se llevó al presunto narco. También arrestaron a la esposa y a dos de sus hijos.