En el marco de su visita a Rosario el próximo Martes 5 de septiembre, cuando Luis Secco, Economista y Director de Perspectivas Económicas, estará brindando un desayuno de trabajo en Fundación Libertad, sobre las claves y panorama a futuro de la economía argentina, conversó con Marcelo Fernández. “Las condiciones para una fase de aceleración nominal están, pero esa fase final de crisis necesita un gatillo. Un evento que coordine expectativas de “game over”. Y tanto el resultado de las PASO como las acciones del ministro-candidato tienen toda la pasta de candidatos a serlo. La devaluación sin plan del lunes 14, después de meses de no hacer nada, salvo “porotear” las reservas, puso al descubierto, como nunca antes, la extrema endeblez de su política económica”, destacó Secco.
A su vez estableció que “la promesa hecha al FMI de que el déficit fiscal estaría en línea con el presupuesto, fue sepultado con anuncios de ampliaciones presupuestarias (prácticamente en todas las partidas de gasto de la Administración Nacional) y por un sinnúmero de políticas de ingresos (el denominado “Plan Platita”)”. Y agregó: “El impacto fiscal de estas últimas, cuyo objetivo sería compensar el salto inflacionario causado por la devaluación, se aproxima a 0,5% del PBI. Y como se trata de medidas que no cuentan con ninguna fuente de financiamiento, tienen impacto directo en el déficit y en las necesidades de financiamiento del mismo. Y, en consecuencia, en las expectativas de inflación”.
“Esta claro, a pesar de su relativa inefectividad, que se trata de medidas de neto corte electoral, que comprometen el control inflacionario, y que, además, colisionan con las recomendaciones que brindó el FMI en el “Staff Report” conocido el viernes pasado, donde sugiere moderación salarial en el sector público y en el gasto previsional, en busca de mantener el objetivo de déficit primario de 1.9% del PBI. Pero lo cierto es que como resultado del desembolso del FMI, el Gobierno tiene ahora los fondos necesarios para hacer frente a los vencimientos con el FMI hasta el 10 de diciembre próximo”, argumentó.
“No veo como el ministro candidato pueda hacer un compromiso que sea creíble en abstinencia fiscal y de consolidación fiscal como pide el Fondo”, puntualizo en cuánto cambió la situación en el país para cerrar dicho acuerdo. Y criticó: “El FMI ha firmado acuerdos con Argentina a sabiendas que no le iba a cumplir y los últimos acuerdos tienen esas características. El fondo aceptó, concedió correcciones y fue relajando las metas a medida que avanzaba el programa y es lo que va a suceder“.
“En este contexto, donde ya no existen “anclas”, y el Gobierno parece ensimismarse en una carrera que le permita incrementar sus chances electorales, los inversores siguen a la búsqueda de cobertura; con el CCL subiendo hasta los AR$770, una brecha cambiaria del 120% y subas generalizadas en acciones y títulos en pesos y dólares. Las medidas “post” paso solo sirvieron para conseguir el acuerdo con el FMI: la inflación se aceleró y la brecha es más alta que antes. Las posibilidades de que el Gobierno logre mantener el dólar en AR$ 350 hasta la primera vuelta crece mucho con el paso del tiempo (porque a medida que nos acercamos a la fecha menos probable otra devaluación discreta). Pero la brecha no tiene un techo claro. Y es de esperar que se produzca alguna nueva corrección discreta de la misma cuando se conozca la inflación de agosto dentro de dos semanas (la cual podría llegar a superar los pronósticos de un 11/12% que se hicieron en un principio). “, determinó Secco.