Tiempos difíciles

Obra pública en Santa Fe, entre la crisis económica y el cierre del grifo nacional

El ministro de Obras Públicas provincial, Lisandro Enrico, admitió preocupaciones y desafíos para su gestión en un área clave, que no contará con recursos nacionales. "Vamos a enfrentar la situación", dijo.

El ministro de Obras Públicas de Santa Fe, Lisandro Enrico, aseguró que el gobierno provincial está preparado para hacer frente a los desafíos y compromisos en medio de un escenario complejo, marcado por la crisis económica general y el aviso desde la Nación de que ya no se financiarán nuevas obras.

“Tomamos un ministerio con complicaciones, pero el gobernador planteó: ‘Avancemos con la obra pública en la provincia’”, afirmó Enrico, quien no soslayó la preocupación por el contexto nacional y la necesidad de abordar el mantenimiento de rutas nacionales, que se encuentran en estado crítico.

“Nos preocupa la cuestión nacional. Estuve en contacto con autoridades nacionales para ver qué hacemos con el mantenimiento de las rutas, que son un desastre: los pozos, los pastos, la falta de iluminación, etcétera. Nosotros vamos a enfrentar la situación, pero el cuadro es complejo. Estamos trabajando con las empresas, una por una, para asegurarles que sigan trabajando pero muchas lamentablemente están despidiendo al personal por todo esto”, expresó entrevistado por Marcelo Fernández para CNN Radio Rosario.

En referencia a obras nacionales que se están ejecutando actualmente en Santa Fe, Enrico señaló que “no son muchas, pero hay algunas”. Y aclaró: “El parate de la obra pública no empezó ahora, hay que ser sincero. Fue el gobierno Alberto Fernández y Sergio Massa el que paralizó la obra, las empresas nos están diciendo que les deben fondos de junio. Entonces, esto viene de arrastre”.

En cuanto a las rutas, expresó su preocupación por el estado calamitoso de algunas, mencionando tramos críticos como las rutas 11, 178, 33 y parte de la 34. “Ayer salíamos de Santa Fe por la circunvalación donde están las luces apagadas, los yuyos altos; es como la circunvalación de Rosario, es una arteria nacional, la provincia no puede trabajarla porque no tiene permiso”, señaló.

A la hora de referirse a los desafíos en el ámbito provincial, Enrico aseguró que se trabajará “en varios frentes”. En ese sentido, mencionó que hay planes para reactivar y mejorar áreas críticas como la empresa Aguas Santafesinas, que está “con niveles de roturas de calles y falta de reparación alarmantes”. Además, mencionó la importancia de ejecutar obras viales e hídricas, así como el compromiso de abordar la problemática de las viviendas.

“Queremos poner también en la mesa de trabajo el tema de la autopista Rosario-Santa Fe, donde hay varias cosas por hacer; hay tramos inseguros, con huellas, rotos, que hay que repavimentar; también mejorar los servicios de ruta, como las estaciones de servicio, y mejorar la iluminación. Y también algún día, por qué no, ejecutar la ampliación de carriles”, expresó.

Sobre el financiamiento para hacer las obras, admitió la posibilidad de buscar fondos externos o internos ante la situación económica compleja, mencionando la falta de alternativas viables. Al mismo tiempo, descartó la idea de poner peajes en rutas provinciales.

Enrico confirmó además que en su área están haciendo un relevamiento de la herencia que dejó el gobierno de Omar Perotti. Como ejemplo, citó el caso de Aguas Santafesinas, una empresa con alto grado de déficit y que en los últimos años empeoró tanto en la prestación del servicio como en la capacidad de respuesta. “Hay desidia en la conducción, pero ahora hemos puesto en marcha un plan de trabajo fuerte para mejorar en todos los aspectos”, apuntó.