Ante la prensa, Pullaro abordó el incidente, expresando que pudo leer la nota por encima y confirmó que la amenaza tuvo lugar en una oficina pública en el corazón de la ciudad.
El gobernador, conocido por su postura firme contra la violencia y el crimen organizado, destacó la respuesta del Poder Judicial ante estas situaciones. Afirmó que, a pesar de sus críticas anteriores, en enero cuarenta fiscales y jueces trabajaron, señalando una reacción positiva ante sus cuestionamientos.
Al ser consultado sobre la posibilidad de que estas amenazas se traduzcan en víctimas civiles, Pullaro expresó su esperanza de que no ocurra. Subrayó su compromiso de trabajar para controlar a las organizaciones criminales y a los violentos en los lugares de detención.
Pullaro advirtió que los responsables de actos violentos sentirán las consecuencias y que «la van a pasar cada vez peor». Concluyó reafirmando que, gracias a su experiencia en el Ministerio de Seguridad, cuenta con medidas de seguridad personales y está bien protegido contra posibles amenazas.
Finalmente, en lo que hace a su situación personal, argumentó: «Les pedí que se queden adentro y ahora que salgan de la ciudad”.
