EN ROSARIO SE COBRA

Nación apunta a intendentes que, como Javkin, gravan combustibles con tasa local

"Estamos terminando de evaluar todas las alternativas que tenemos a disposición para que esto deje de ocurrir, que no pase, es un abuso", aseguró el vocero presidencial, Manuel Adorni.

Luego de postergar la entrada en vigencia del aumento en el impuesto nacional a los combustibles, el Gobierno de Javier Milei prometió represalias a los intendentes que, como el rosarino Pablo Javkin, impulsaron el cobro de una tasa a naftas y gasoil para hacer frente a la sequía de fondos en un contexto de profunda recesión y aumentos de precios.

La medida impugnada por el vocero presidencial Manuel Adorni remite a un mecanismo con lo que algunos municipios intentan compensar la caída de los ingresos y el ajuste público implementado desde el Ejecutivo nacional. En el conurbano bonaerense, son 19 los intendentes que ya consiguieron aprobación para cobrar tasas viales sobre el combustible destinadas formalmente, en la totalidad de los casos, al mantenimiento de las calles. Las alícuotas van del 1,5% al 2,5% del precio del litro de combustible o incluso un monto fijo. En Mar del Plata, por ejemplo, es del 1,86% y comenzó a cobrarse en febrero.

En Rosario, la tasa es del 1,6%. Entró en vigencia el viernes 5 de abril pasado gracias a su controvertida aprobación en el Concejo Municipal, donde obtuvo 15 votos a favor, 12 en contra y una abstención.

“Hemos notado cierta proliferación de varios municipios que intentan cobrar nuevas tasas a través del ticket de combustible”, señaló Adorni. Para el vocero, se trata de un “abuso” que “tiene cautiva a la gente para cobrarles una tasa municipal que nada tiene que ver con la carga de combustible y que deja atada a la gente a tener que abonarla compulsivamente”, cuestionó el vocero. No precisó, sin embargo, cuáles son las acciones que el Gobierno nacional tienen bajo estudio para bajar esos gravámenes.

En Rosario, la decisión generó rechazo de la oposición local pero también de los estacioneros, que se quejaron por el perjuicio: muchos automovilistas, especularon, terminan cargando en surtidores de localidades cercanas que no cobran el tributo.

En la provincia de Buenos Aires, el recurso se extiende también. Los municipios de Merlo, Pilar y Moreno encabezan el ranking. En el distrito que conduce el intendente peronista Gustavo Menéndez rige una alícuota del 2,50% para los combustibles líquidos y sube a un 4,50% para el GNC. Federico Achával, en Pilar, decidió lo mismo y por valores similares.

La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, consiguió que el Concejo Deliberante le aprobara un 2%. En La Matanza, el porcentaje es de un 1,5% para naftas y gasoil y de un 1% para GNC. Y en José C. Paz, el intendente Mario Ishii estableció el 1% para todos, pero siguen los ejemplos.