
Javier Milei está decidido a respaldar la continuidad de Manuel García-Mansilla en la Corte Suprema, donde asumió tras ser nombrado por decreto presidencial hasta el 30 de noviembre, aun si el Senado rechaza su pliego el jueves. Habrá una fuerte presión para dejar la votación sin cuórum, en caso de que haya comenzado la sesión.
“Nuestra interpretación es que el pliego es abstracto, a no ser que sea para confirmarlo, porque ya está nombrado en comisión. El inciso 19 del artículo 99 de la Constitución puede no gustar, pero es bien claro”, explicó un aliado del Gobierno en el Senado que está dispuesto a resistir.
El fragmento de la carta magna que tomó en cuenta Milei para nombrar jueces no menciona qué hacer si un juez nombrado por decreto tiene un pliego rechazado. Sólo incorpora, entre las atribuciones del Poder Ejecutivo, la de “llenar las vacantes de los empleos, que requieran el acuerdo del Senado, y que ocurran durante su receso, por medio de nombramientos en comisión que expirará al fin de la próxima Legislatura”.
En Unión por la Patria creen que el inciso cuatro del mismo artículo (99) prevalece. Señala que el Poder Ejecutivo “nombra los magistrados de la Corte Suprema con acuerdo del Senado por dos tercios de sus miembros presentes, en sesión pública, convocada al efecto”.
El dato, no menor, es que en estas líneas sí se hace mención explícita al máximo tribunal, mientras que en la que tomó Milei es más genérica. En el oficialismo no aceptan esta interpretación y juegan con la complicidad de Rosenkrantz y Rosatti.
“La Corte le tomó juramento así que no vemos que cambien. Hasta se generaría un precedente complicado para que la Corte diga que García-Mansilla entró en comisión y seguirá. No voy a entrar en esa trampa”, sostuvo un senador del PRO.
Larga pelea
La continuidad de García-Mansilla en la Corte será una de las novelas de este año. Este lunes, Cristina Fernández de Kirchner presentó un recurso de queja en el máximo Tribunal para pedir que el académico no interfiera en el recurso de queja planteado ante el fallo del Tribunal de Casación que ratificó su condena en la causa Vialidad.
Si el pliego de García-Mansilla resulta rechazado, se objetará cada fallo que firme. El juez federal de La Plata Alejo Ramos Padilla declaró la inconstitucionalidad del decreto que le permitió al académico asumir en la Corte, pero decidió diferir la aplicación hasta la sesión de este jueves.
En su respuesta, el flamante supremo defendió su designación y sostuvo que la única manera de echarlo es con un proceso de juicio político, como ocurre con cualquier juez de la Corte. Claro que, si prospera un proceso judicial en su contra, la última instancia es el máximo tribunal, donde Rosatti y Rosenkrantz pueden salvarlo. Deberá hacer buena letra.
Fuente: Letra P