
El próximo viernes, los gremios estatales y docentes serán llamados para retomar la negociación paritaria y determinar la recomposición salarial de los próximos meses. Los primeros datos indican que las reuniones comenzarán por la mañana con los estatales y luego continuarán con los docentes.
En las paritarias pasadas, el gobierno había otorgado un aumento del 5% para el primer trimestre del año, con un piso garantizado de 50 mil pesos en enero y de 70 mil en febrero. Sin embargo, durante ese mismo período, la inflación acumulada llegó al 9,5%.
Desde los gremios buscarán no solo que se compense la diferencia respecto a la inflación, sino también que se conceda un aumento que permita recuperar el poder adquisitivo de los trabajadores.
Para Rodrigo Alonso, secretario general de AMSAFE, el gobierno eligió a los docentes como enemigos:
“En primer lugar, lo primero que esperamos es que nos llegue la convocatoria. Así que estamos a la expectativa de que llegue. Vamos a ir con una serie de planteos que creo que son el resultado de una política que llevó adelante el gobierno de la provincia, que es prácticamente la de desconocer el ámbito paritario”.
“La paritaria, que es una negociación entre partes, lo que hacía el gobierno: te presentaba una propuesta, no había ni reuniones técnicas. Te gustaba, la aprobabas; no te gustaba, ellos te lo sacaban por decreto. No se podía discutir esa propuesta, era una imposición del gobierno”, agregó.
Posteriormente, detalló: “Hubo una propuesta paritaria del 5% por el trimestre, los docentes le dijimos que no. El gobierno la sacó por decreto y nos encontramos con que en el primer trimestre la inflación fue del 9,5%: perdimos en el primer trimestre del 2025, perdimos un 23% en 2024”. Y sumó: “Pedimos todavía la deuda de la paritaria 2023, que el gobierno incumplió un acta paritaria, incumplió la convocatoria a titularización y traslado de nivel inicial, primario y especial que se llevaba adelante desde el año 2009. Ni hablar de la reforma previsional, que nosotros vamos a exigir que se derogue, y el presentismo que indudablemente está originando que los docentes vayamos enfermos a trabajar, lesionando todos los derechos laborales y también los procesos de enseñanza-aprendizaje”.
Sobre el presentismo, reflexionó: “El gobierno se equivoca en entender que el único objetivo es que los docentes no hagamos paro. En vez de preocuparse tanto por extorsionarnos con este presentismo, con el descuento de los días y demás, debería preocuparse por escuchar un poquito, por empezar a tomar políticas que tiendan por lo menos a recuperar alguno de los derechos de los trabajadores”.
Y recordó: “Se cumplen dos años de una campaña electoral en donde el gobierno de la provincia dijo que íbamos a tener cláusula gatillo, que no íbamos a perder ante la inflación, que iba a respetar los derechos de los jubilados, de los docentes, y nada de eso sucedió. Hizo todo lo contrario”.
Alonso aseguró que en esta paritaria “tiene la posibilidad de dar vuelta la página, decir ‘se acabó el ajuste’ y empezar a recuperar derechos, que creo que es la única forma de poder mejorar los procesos de aprendizaje”.
Luego de sostener que Pullaro eligió a los docentes como “enemigos”, afirmó: “Con AMSAFE no van a poder, porque es una organización que viene creciendo, que tiene fuerza, que las definiciones son definiciones colectivas. Y creo que el gobierno que debería preocuparse no por limitar la actividad sindical, no es por atacar a los trabajadores, sino todo lo contrario: debería preocuparse por llevar adelante políticas inclusivas, políticas que definitivamente mejoren la escuela pública”.
Finalmente, cerró: “Tiene que leer lo que está pasando, tiene que leer el malestar que hay en las escuelas, y creo que ese malestar no le hace bien a la educación pública”.