
El Gobierno, a través de Arca, informó que “se ha alcanzado la registración del cupo de siete mil millones de dólares previsto por el decreto 682/2025, por lo que se ha dado de baja la opción de registración de las Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE) que se encuentren amparadas por el beneficio del citado decreto”. En un comunicado, la agencia recaudadora avisó que, a partir de ahora, “solo podrán registrarse DJVE bajo el esquema vigente anterior al decreto 682/2025”.
La rebaja de retenciones tenía un plazo y un tope financiero. El beneficio de retenciones cero estaría vigente hasta el 31 de octubre de 2025 o hasta que el volumen de ventas alcance registros de Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE) por un importe equivalente a 7000 millones de dólares.
La decisión tiene de trasfondo el reclamo que el secretario del Tesoro, Scott Bessent, realizó al anunciar que la Casa Blanca estaba en negociaciones con funcionarios argentinos por una línea de swap de 20.000 millones de dólares con el Banco Central. En ese marco, el funcionario norteamericano incluyó una referencia directa al esquema fiscal del campo. “Estamos trabajando con el gobierno argentino para poner fin a la exención fiscal para los productores de materias primas que convierten divisas”, afirmó Bessent en su cuenta de X.
l alivio fiscal que anunció el Gobierno encendió en las últimas horas los motores del campo que, en las primeras 48 horas de vigencia del Decreto 682/2025 que fijo en 0% los derechos de exportación para granos, subproductos y carne, ya había comercializado 11,47 millones de toneladas.
Según los números de la Bolsa de Comercio de Rosario, el volumen operado equivale al 59,7% del tope establecido por el Decreto 682/2025 y se estima que el valor asciende a u$s 4181 millones.
El alivio fiscal alcanzaba a la soja, el maíz, el trigo, el girasol y otros cultivos, con el objetivo de ayudar al ingreso de divisas y reforzar las reservas del Banco Central (BCRA).
Al hacer el anuncio de la baja de retenciones, el vocero presidencial, Manuel Adorni, explicó: “La vieja política busca generar incertidumbre para boicotear el programa de gobierno. Al hacerlo castigan a los argentinos: no lo vamos a permitir. Por eso, y con el objetivo de generar mayor oferta de dólares durante este período, hasta el 31 de octubre habrá retenciones cero para todos los granos”.
La presión de Bessent tiene, a su vez, un contexto económico y geopolítico específico, que involucra a China, rival principal de Estados Unidos y uno de los beneficiarios de la eliminación temporal de los derechos de exportación por parte de Argentina. De hecho, ayer se supo que “compradores chinos reservaron al menos diez cargamentos de soja argentina“, informó Reuters.
En un contexto de tensiones comerciales, mientras China mantiene un bloqueo de compra de soja a los Estados Unidos -como represalia al alza de aranceles-, tras la eliminación de retenciones, ayer se habían disparado las compras de oleaginosa a la Argentina.
Fuente: Cronista Comercial