El mundo está en un proceso de cambio continuo y la producción de biocombustibles es clave. Mientras tanto, en Argentina se espera por una nueva ley porque de los contrario el futuro de la región es muy incierto, como lo admitió el presidente de CIARA-CEC, Gustavo Idígoras, en declaraciones a CNN Radio Rosario.
Nuestro país continúa relegando posicionamiento global contra Estados Unidos, especialmente, por la construcción de plantas de “crushing”, que es la forma de moler el poroto y producir el aceite de soja, para comenzar con una matriz productiva de combustibles renovables. En este contexto, Argentina, sigue perdiendo su mayor poder de exportación como es la harina de dicho grano. Por tal motivo si no hay un cambio de paradigma en este aspecto, más precisamente normativo, las consecuencias podrían llegar a ser devastadoras para la zona del cordón industrial.
Al respecto, Idígoras dijo: “Es muy preocupante, Argentina tiene la primera industria exportadora del mundo y se encuentra en crisis por dos razones, el fuerte estancamiento de la producción de soja en Argentina, hace 15 años que producimos exactamente lo mismo por el enorme presión tributaria que tiene la soga, y en segundo lugar Estados Unidos está subsidiando la industrialización de la soja para sustituir el diesel mineral con el 100 por ciento de aceite de soja hidrogenado”, comenzó explicando.
Y a continuación agregó: “Pero le sobra la harina que es el gran producto de exportación argentina y por lo tanto la está rematando. Por consiguiente nos desplaza del sudeste asiático que es nuestro gran mercado. Si no se hace una ley de biocombustibles en la Argentina para que nosotros también seamos competitivos, nuestro futuro es absolutamente incierto. Y el Gran Rosario entraría en una crisis profunda, en los próximos tres o cuatro años se define todo”, alertó.
También pidió que haya “una política de no castigo sobre la soja porque de lo contrario Estados Unidos y Brasil nos van a arrasar y nosotros seremos un jugador de tercera división con muy bajo poder de fuego y con el cierre de muchísimas plantas”, advirtió.
Finalmente se refirió al tema de los biocombustibles: “Hoy muy pocas empresas tienen cautivo el mercado, el consumidor argentino está pagando un biodiesel muy caro a un precio artificialmente alto. Y nosotros lo que propiciamos es competencia, oferta y demanda, y que el consumidor pague el mejor al precio más bajo posible y el corte incremental porque todo el mundo está yendo a sustituir los combustibles fósiles”, comentó.
Cambio de paradigma
Idígoras: “En los próximos tres o cuatro años se define el futuro del Gran Rosario”
El titular de CIARA-CEC aseguró que la situación “es preocupante” por el “fuerte estancamiento” de la producción de soja, sumado a que Estados Unidos subsidia “la industrialización” de dicho grano. Y pidió “una ley de biocombustibles”