“Después de la reunión de esta semana en Merlo, entre Massa, Kicillof y Máximo Kirchner; Alberto habrá pensado como decía Herminio Iglesias, ‘conmigo o sinmigo’. Y consideró que la política se iba a hacer igual de cara a la presidencial, así que convocó la mesa”, expresó en diálogo con Aire de Mañana, de Guillermo Panizza.
“Desde Vicentín para acá, Alberto es un pato rengo. Creo que el peronismo, el Frente de Todos, manifiesta una crisis porque es un movimiento vertical: cuando no tiene jefe tiene problemas. Y esta horizontalidad, la mesa, si son de 3, 10, 15 o 20, en un movimiento que hace gala de la conducción… Es de lo que careció el Frente de Todos de 2019 para acá. Fue una excelente estrategia electoral, pero como gobierno disfunciona porque no tiene una conducción nítida”, agregó.
Ahora hay que ver cómo llevan adelante una campaña en esta situación. El peronismo nunca tuvo PASO a nivel presidencial. Si hubiese una PASO competitiva, ¿es debilidad o fuerza? ¿Es oportunidad o amenaza?
“Volvemos al tema de la conducción. Cuando él no quería que se resuelva algo, llamaba a una comisión. Pero esta mesa, sin conducción, se parece más a una reunión de consorcio que a una reunión política”, analizó.
“La sociedad te pide liderazgo y vos ofrecés mesa. Ahí hay un problema de comunicación. En estos últimos tres años fue evidente que un Presidente no puede tener un tribunal de alzada. Lo que se discute en 2023 es si de las elecciones surgirá un nuevo liderazgo, o si vamos a seguir con esta cuestión que finalmente no termina de definir un rumbo”, sumó.
En relación a la vereda opuesta, indicó que “Macri ha cultivado el arte de la política fuertemente en los últimos tiempos. Hay un Macri post PASO 2019. Hasta ese momento era una versión más duranbarbista, importaba más la comunicación, las redes. Después del cachetazo de los 16 puntos de distancia en 2019, y ahí empezó a salir a las calles. Después de ser Presidente, fue rosca pura. Armó dos libros: Primer Tiempo, que te sugiere que está pensando en un segundo tiempo, y otro se llama Para Qué. No sabemos cuál le gusta más a Macri. Uno sospecha que debe querer volver, pero también sabe que eso sería lo más funcional a la unidad del Frente de Todos. Creo que le plantea una inquietud al Frente de Todos, porque de alguna manera va a jugar. Si juega como candidato, creo que le da un motivo al Frente para mantenerse unido. Y si no va como candidato pero si como arquitecto, puede generar problemas, la idea de que otra vez hay alguien por encima del poder para ver qué opina, como pasó con Alberto Fernández y Cristina”.
Macri y Cristina son dos personalidades políticas importantes, pero también son jarrones chinos: ¿Qué hacemos con ellos?
“Hay 15 elecciones para gobernador separadas de la elección nacional, y ahí la fuerza política de Milei no va a estar. Entonces cuando digas ‘se votó acá, allá’ y no estuvo su fuerza, ¿qué efecto tendrá eso para Milei de cara a las PASO? Ninguna encuesta le da menos del 15% y eso lo pone en las discusiones”, cerró.
Fuente: CNN Radio
