Transformación del casco céntrico

Rosario recupera su esplendor histórico: El Pasaje Juramento vuelve a brillar

Un símbolo de la ciudad, reabre este sábado completamente renovado tras un profundo proceso de restauración y puesta en valor. También se presentaran las remodeladas fachadas del Palacio de los Leones y la Catedral. Las obras devuelven el esplendor original al casco histórico, epicentro del nacimiento de la ciudad, y se integran al gran programa de legados urbanos impulsado por el municipio en el marco de los 300 años

Tras las importantes tareas de puesta en valor y de restauración que se desarrollaron en el Pasaje Juramento, el Palacio Municipal y la Catedral, desde este sábado, este sector tan emblemático donde nació Rosario, ya puede volver a ser utilizado por la gran cantidad de rosarinos y de visitantes que pasan a diario por esos sitios de gran interés urbano y turístico. Con estas obras, que incluyeron importantes trabajos de renovación, la Municipalidad busca dejar legados urbanos de gran relevancia en zonas de alto valor simbólico y patrimonial. Estas reaperturas se llevarán adelante el mismo día de una nueva edición de las Noches de las Peatonales, ya un clásico de la ciudad.

En el núcleo histórico, donde la ciudad nació y dio sus primeros pasos, este sábado vuelven a salir a escena, totalmente renovados, el Pasaje Juramento, el Palacio Municipal, y la Catedral, sitios muy tradicionales, muy arraigados en los sentimientos y en las costumbres de los rosarinos y rosarinas, ya que representan cartas de identidad muy arraigadas y relacionadas a los orígenes de la población.

Como parte de los festejos por el Tricentenario, se llevaron adelante importantes trabajos de mejoras y de restauración en esta zona de alto valor histórico y simbólico. En ese marco de celebraciones, junto a una nueva edición de las Noches de las Peatonales, este sector vuelve a exhibir sus renovados atractivos urbanos, y puede volver a ser aprovechado y disfrutado por la gran cantidad de visitantes que pasan a diario por ese núcleo urbano tan relevante.

En el lugar donde se situaron las primeras piedras con las que se comenzó a construir la capilla, alrededor de la que se desarrolló la ciudad, la Municipalidad realizó tareas de mejoras en obras que buscan dejar valiosos legados que servirán de manual de dirección para seguir creciendo, mirando de frente al futuro.
Esta transformación urbana que promueve esta gran cantidad de obras que se impulsan por los 300 años, también busca acentuar el perfil de una ciudad turística, de brazos abiertos, de sacrificio y esfuerzo, que sigue enfocando hacia adelante, por su propia decisión.

En ese escenario festivo por el importante aniversario, se desarrollaron tareas de puesta en valor en el Pasaje Juramento, que incluyeron trabajos en el espejo de agua y sobre las esculturas de Lola Mora. Y, en esa misma dirección, se llevaron adelante tareas de restauración en el Palacio Municipal y la Catedral.
Más adelante, a principios de diciembre de este año, se estarán finalizando los trabajos de renovación en la Plaza 25 de Mayo, que completará la ambiciosa reconversión en todo ese sector, de gran trascendencia histórica.

En relación a la enorme relevancia histórica que tienen estas obras, tan incorporadas y valoradas por todos los rosarinos, el intendente Pablo Javkin, destacó que “representan un grupo de obras muy esperadas, por la zona de la ciudad en la que están insertadas, y por el trascendental rol que cumplieron en los inicios, que hoy se recuerdan y celebran. Es la manzana cívica donde todo comenzó en Rosario, y hoy muestra una nueva cara, que sirve para mirar de frente los nuevos tiempos”.

En ese mismo sentido, el mandatario se encargó de remarcar que “creemos que la ciudad está en un gran momento. Hoy direcciona un enorme esfuerzo para poder realizar esta gran cantidad de obras de festejos por el Tricentenario, que van dejando un legado urbano muy valioso. Hoy destina importantes recursos en obras y espacios públicos que servirán para que todos puedan aprovechar al máximo de cada uno de estos lugares de encuentro y disfrute que distinguen a esta ciudad”.

Por su parte, el Subsecretario de Obras Públicas de Rosario, Juan Manuel Ferrer, puntualizó que la idea en las celebraciones en el marco de los 300 años, “apuntan a poner en valor los edificios y los espacios públicos, teniendo en cuenta cómo fueron concebidos. Por eso, la gran transformación y reestructuración que estamos realizando, nos va a permitir imaginar lo que fue la ciudad en sus primeros pasos de crecimiento urbano”.

De la misma manera, el funcionario agregó que “se inauguran obras de alto valor histórico y patrimonial, y ya desde este sábado 25 de este mes, ya podrán ser usados nuevamente por la gran cantidad de rosarinos, que habitualmente transitan por esa zona. Será una fecha muy especial, de muchas celebraciones, ya que en esa jornada también se desarrollará otra edición de la Noche de las Peatonales, que se realiza al mismo tiempo”, precisó Ferrer.

El Pasaje Juramento

A partir de este sábado, después de los trabajos de recuperación y de puesta en valor, ya podrá utilizarse el Pasaje Juramento, un hito de gran relevancia urbana e histórica. En ese sector tan tradicional, que conecta de manera peatonal el Propileo del Monumento Nacional a la Bandera, con la Plaza 25 de Mayo, se realizaron mejoras muy importantes en la fuente y también sobre las esculturas de Lola Mora, que permitieron recuperar su esplendor artístico.

Además, se retiró el piso anterior de placas de mármol de Carrara, que estaba en un estado muy deteriorado, se ejecutaron carpetas, contrapisos, y se colocó un nuevo piso tipo Dekton Danae, con placas de 1.42 m x 0.71 m, que cuenta con tecnología antideslizante, un material adecuado para el alto tránsito que hay en ese trayecto.
También, se reparó y se puso en funcionamiento la emblemática fuente de agua. Esos trabajos comprendieron retiros de revestimiento de canto rodado, impermeabilizaciones, sellados, carpetas, tareas en el sistema hidráulico, y en la instalación eléctrica.

Y, se llevaron adelante trabajos de parquización en el talud lindero al Palacio Municipal, y los arreglos incluyeron la iluminación en ese sector que contará con dispositivos especiales alrededor de las esculturas.

Así, el Pasaje Juramento reabre con una renovación que abarcó una nueva iluminación que permitirá disfrutar, con más seguridad y a toda hora, del emblemático tramo. Esa intervención, incluyó rampas de acceso al pasaje y el arreglo del empedrado histórico de calle Córdoba, que llevó un esfuerzo muy especial y tareas de carácter artesanal.

El Palacio de los Leones

En tanto, en el Palacio de los Leones, se realizaron tareas de restauración en la fachada sobre calle Buenos Aires. Y, aprovechando esos trabajos en el frente y los arreglos que se hicieron en los sectores de mampostería con riesgo de derrumbe, se llevaron adelante tareas de pintura que le devolvieron su color original.
También, esta obra abarcó tareas de refacción en balcones, molduras y revoques y, al mismo tiempo, se impermeabilizaron las terrazas.

En el hall de ingreso también se realizaron modificaciones, al igual que la iluminación general del lugar. Más allá de eso, el mayor grado de atracción en esta transformación tuvo que ver con el cambio de color sobre la fachada.

Es que, después de décadas, el Palacio de los Leones dejó su color morado y volvió a lucir su fachada original, un tono cercano al color arena.
Fue una tarea que requirió trabajos muy complejos, ya que el emblemático edificio contaba con diversas capas de pintura a lo largo de sus 130 años de historia y, para poder lograr y reconstruir esa tonalidad, se debió escarbar capa por capa.

Se llevó adelante un abordaje que se hizo con muchísimo cuidado y personal especializado. Y se fue evaluando a nivel cromático las partículas que iban quedando, y de esa manera se arribó a la muestra más exacta de lo que fue el color original, para devolverle el aspecto original de principios del siglo XX.
Desde la Municipalidad, se buscó el color más fiel en relación al que tuvo en los inicios, en los comienzos de la ciudad.

Vale precisar que, ya finalizada esta primera etapa en el Palacio Municipal, la obra continuará sobre calle Santa Fe, donde también existen deterioros importantes en su fachada.

La Catedral
Otro foco muy importante en estas tareas de transformación de todo el casco céntrico, se situaron en la restauración en la Catedral, que incluyeron trabajos de recuperación en las fachadas, las terrazas, y en las torres del edificio histórico. Y la acción, además, abarcó la Casa Parroquial.

En ese edificio, probablemente el de mayor relevancia histórica, porque alrededor de él comenzó a crecer la ciudad, se modificó de manera completa la cubierta de chapa; se impermeabilizaron las terrazas, la cúpula mayor y las menores; y además se realizaron trabajos de pintura general, y se reconstruyeron las cornisas y las molduras. También, se repararon los revoques con nuevos, idénticos a los originales.

Además, se implementaron nuevas instalaciones eléctricas para cada terraza, se restauraron objetos y esculturas de metal, se pintaron aberturas, y se trabajó sobre la protección de la herrería y se restauró la existente. Y se colocó nueva zinguería.

Cuando se ponga en funcionamiento el sistema de luces, este edificio de gran valor patrimonial contiene muchos relieves, cornisas e imágenes, que se van a lucir a pleno de noche. Quienes visiten esa obra podrán contemplar todas sus virtudes arquitectónicas.

En este gran marco de celebración que toda la ciudad vive por el Tricentenario, para ponerle un moño de cierre a los trabajos de revitalización y de puesta en valor en el casco céntrico, a principios del mes de diciembre se concluirán las tareas de remodelación de la Plaza 25 de Mayo. Otro espacio de enorme relevancia histórica y simbólica, que también estará a la altura de los festejos.