En diálogo con Federico Seeber en Regreso CNN, la abogada sostuvo que “no es una reforma que pueda pasar acá” y explicó por qué: “Tenemos una tasa de sobrevida de la jubilación promedio de 14 años y es más baja que la de los países que están emprendiendo el cambio. Además, en argentina por la informalidad laboral, solo 7 de cada 10 personas logran completar los 30 años de servicios”.
“Seguir extendiendo la edad jubilatoria con personas que no llegan con los aportes y no consiguen trabajo porque el pico de desocupación es a los 45 años, momento en que son despedidos de sus trabajos, no es ni una posibilidad ni una necesidad en nuestro país”, remarcó.
Falcone, señaló que “las reformas en Europa se hacen de forma paulatina y por cada año se va agregando un mes a la edad jubilatoria. Esto es correcto y hay que implementarlo, pero siempre es antipático”.
“Es necesario porque hay que adecuar la nueva realidad democrática a los sistemas jubilatorios. Hoy la expectativa de vida es de 70 a 84 años según cada país”, precisó.
En esta línea, expresó que “aceptar que la jubilación va a ser complementaria y muy poco relevante, puede ser doloroso y generar temores, pero es una situación que hay que enfrentar”.