Según datos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), mientras en el ciclo 2010/2011 Argentina detentaba el 17 por ciento de la producción global, la participación bajó al 13 por ciento en la campaña 2020/2021 y al 10 por ciento en la última cosecha. Esto se debe, por un lado, a que la producción mundial aumentó más rápidamente que la local, y por otro, a la merma derivada de la sequía. Por caso, en 2021/2022 la cosecha argentina llegó a 30,3 millones de toneladas y en la actual campaña apenas a 23,6, es decir que disminuyó un 22 por ciento, el volumen más bajo desde 2004/2005. No obstante, para el próximo ciclo, la entidad proyecta una recuperación de la producción de la oleaginosa de alrededor de un 14 por ciento.
Después de 25 años, Argentina pierde el liderazgo como exportador mundial de harina de soja.
📌Nota: https://t.co/yk5fbV8JfB pic.twitter.com/wf0KGGmUJp— BCR Mercados (@BCRmercados) October 6, 2023
Argentina es el cuarto productor mundial de harina de soja, ubicándose por arriba China, Estados Unidos y Brasil. Estos países, junto a la Unión Europea que ocupa el quinto lugar en el ranking, concentran más del 80% del volumen de harina de soja producido a nivel global. Además, desde los años ’90, Argentina el principal exportador global de harina de soja ya que, a diferencia de China, Estados Unidos y Brasil, su consumo interno es bajo en relación con la producción total, por lo que cuenta con un importante saldo exportable.
Esta campaña, no obstante, la sequía llevó a una significativa caída de la producción argentina de harina de soja y, paralelamente, Brasil la incrementó notablemente tras obtener un récord de cosecha de la oleaginosa. Así, por primera vez desde 1997/1998, Argentina perderá el puesto como principal exportador mundial de harina de soja, y será superado por Brasil.
En definitiva, de acuerdo a estimaciones de la BCR, las exportaciones de Argentina serían de 21,1 millones de toneladas esta campaña, lo cual representa un descenso del 21 por ciento en comparación al ciclo previo. Mientras que Brasil, vendería al exterior 21,5 millones de toneladas.