El presidente Javier Milei parece dispuesto a librar una nueva batalla contra la CGT. Según trascendió, el Gobierno tiene todo listo para publicar un decreto este lunes para desregular las obras sociales.
La medida, que de alguna manera se había incluido en el mega DNU y la Ley ómnibus, liberalizará de forma absoluta el sistema de salud y abre la competencia con la medicina prepaga. Y tendrá un impacto directo en las cajas de los sindicatos.
Una vez publicado el decreto, se eliminaría la intermediación de las obras sociales y el trabajador podría derivar los aportes directamente a las empresas de medicina prepaga.
Otra norma que dejará de tener validez es una que obliga a los trabajadores que “inicien una relación laboral deberán permanecer un año en la Obra Social correspondiente a la rama de su actividad antes de poder ejercer el derecho de opción de cambio”.
Los trabajadores podrán elegir prepagas sin que los fondos pasen por las obras sociales y sin un tiempo mínimo de permanencia.
De implementarse esta medida cada afiliado podrá decidir a qué empresa van la totalidad de sus aportes, sin pasar por una obra social. Hasta el momento, los usuarios de las prepagas derivan sus aportes a una obra social sindical, que se quedaba con un porcentaje antes de girar los fondos a la prepaga. Esa intermediación no existirá más.
Las prestadoras de salud podrán aumentar el porcentaje que decidan. De hecho, en los últimos meses se registraron distintos aumentos en ese sentido.