“Maduro no pudo tocar suelo argentino por narco y por violador de los derechos humanos. Siento que su insulto demuestra el triunfo logrado. Al nombrarme enaltece mi decisión de impedir que toque suelo argentino”, aclaró Patricia Bullrich, presidente del PRO, por los dichos del dictador venezolano para intentar justificar su inasistencia a la Cumbre de la CELAC en Buenos Aires: “Fue por las ratas del macrismo, la Patricia Bullrich y el partido judicial”, afirmó.
La titular del PRO se enteró en medio de una recorrida de campaña por Tigre de las descalificaciones de Maduro por la presentación que hizo el domingo pasado ante la Administración para el Control de Drogas (DEA) para solicitar la captura del líder bolivariano y que fue decisiva para que desistiera de viajar a la Argentina. Al anunciar que Maduro no volaría a nuestro país, el régimen chavista le echó la culpa a “un plan elaborado en el seno de la derecha neofascista, cuyo objetivo es llevar a cabo una serie de agresiones en contra de nuestra delegación encabezada por el presidente”.
Cuando se conoció la noticia, el lunes pasado, Bullrich estaba en el country Cumelén, en Villa La Angostura a punto de reunirse con Mauricio Macri y afirmó: “Lo frenamos con la DEA. Pánico tiene con esa denuncia”. Dentro del PRO, la frase incomodó al larretismo, que considera que Maduro no viajó por la presentación bullrichista y también por la denuncia efectuada ante la Justicia por Waldo Wolff, secretario de Asuntos Públicos del gobierno porteño, quien, como titular del Foro Argentino para la Democracia en la Región (Fader), denunció en Comodoro Py a Maduro y a sus colegas de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, por “la persecución política contra organizaciones civiles y personas físicas”.