Un informe socioeconómico elaborado en septiembre de este año por la Encuesta Nacional Inquilina reveló que uno de cada cuatro inquilinos rescindió el contrato al no poder afrontar el precio del alquiler, mientras que el 92% de ese universo de inquilinos ostenta condiciones contractuales por fuera de la ley de alquileres.
A su vez, casi la mitad de sus ingresos está destinado a pagar el alquiler y las expensas, sin tener en cuenta los impuestos y servicios. Es por eso que los principales problemas que abruma a la clase trabajadora es vivienda, ingresos y tarifas, puesto que la mayoría de los contratos se actualizan cada tres o cuatro meses en su gran mayoría.
Sebastián Artola , referente de la Federación de Inquilinos Nacional y responsable de Inquilinos Agrupados Rosario, afirmó: “ La realidad de los inquilinos es cada vez más difícil. Los resultados del informe de septiembre son preocupantes y muestran como principal problema la dificultad creciente para sostener el pago del alquiler” .
“Desde el DNU 70/2023 nos encontramos con contratos que tienen aumentos cada tres meses, por encima de la inflación y por un plazo de dos años”. “Si a esto le sumamos los gastos de ingreso (comisión inmobiliaria, sellado, depósito) y los aumentos en los servicios e impuestos, el combo es fatal” , agregó Artola.
“Uno de los principales impactos lo vemos en la rescisión anticipada de contratos, el otro, en el endeudamiento creciente en los hogares inquilinos”, concluyó Artola.
● Desalojo Económico: El 26,7% de los encuestados (1 de cada 4 inquilinos/as) indicó que tuvo que abandonar la vivienda por no poder afrontar el precio del alquiler. De este universo el 92% tiene condiciones contractuales por fuera de la ley de alquileres. En el mes de junio esta situación representaba el 15%.
● Ley de alquileres: Sólo el 14,8% está bajo las condiciones de la ley de alquileres: plazo de 3 años y actualización anual por el Índice de Contratos de Locación.
● Trabajar para pagar el alquiler: En septiembre de 2024, el 44,5% de los ingresos totales del hogar se destina a pagar el alquiler más las expensas, sin considerar impuestos y tarifas de servicios públicos. En el caso de aquellos alquileres que iniciaron después de la entrada en vigencia del DNU 70/2023, la incidencia asciende al 49,8%.
● Futuro: El 88,9% de los inquilinos encuestados considera que tendrá dificultades para afrontar el pago del alquiler en los próximos meses. Solo el 11% respondió que no las tendrá.
● Endeudamiento: El 64,6% de los hogares inquilinos encuestados tiene deudas de algún tipo actualmente. Las deudas contraídas son para: alimentos, alquiler y tarjetas de crédito.
● Desempleo: El 5% de los inquilinos se encuentra desempleado. El 24% afirmó estar buscando trabajo.
● Emancipación: La edad promedio de emancipación se encuentra entre los 26 y 30 años. Las condiciones laborales de los menores de 25 años y las exigencias del mercado inmobiliario -recibos de sueldo que tripliquen el valor del alquiler, antigüedad laboral, etc- es la primera barrera de acceso al alquiler de vivienda.
● DNU vs Ley de alquileres: Los contratos iniciados en el año 2024 bajo el DNU 70/2023 pagan hasta un 35% más que aquellos que comenzaron en el marco de la Ley de Alquileres. En algunas provincias como en Santa Fe, alcanza hasta una diferencia del 40%.
● Contratos cortos: En los contratos firmados a partir del DNU, el plazo de 3 años ya sólo se presenta en el 7,2% de los casos. Como contrapartida, creció fuertemente la participación de contratos de alquiler cortos. Aquellos con un período de duración menor o igual a 1 año representan el 17,1% de los casos. Y los contratos entre 1 y 2 años son ahora los más frecuentes, en un 59,9% de los casos relevados en septiembre.
● Actualización del precio: En promedio, 7 de cada 10 inquilinos/as que firmaron sus contratos luego del decreto tienen aumentos mensuales o cada 3-4 meses. El 94,8% de los inquilinos/as tiene actualizaciones en el precio del alquiler en plazos iguales o menores a 6 meses.
● Preocupaciones: La amplia mayoría (más del 80%) respondió que la situación de la vivienda y la evolución de sus salarios/ingresos son los principales motivos de preocupación en la actualidad. Luego siguen las tarifas.